Primera experiencia de Carlos Arnelas en USA

Viajar y conocer nuevos lugares y personas es una de las mejores cosas que esta profesión te puede dar.

Recuerdo llegar a Los Angeles, y descubrir Estados Unidos por primera vez hace justo hoy un mes.

Una de mis primeras experiencias en América fue un poco desastrosa, ya que llegué al aeropuerto, esperé a que saliera mi maleta y después me conecté al wifi para pedir un UBER e ir rumbo a mi encuentro con mi bestfirend Marta Carriedo.

Entré en la aplicación, seleccione el punto de origen y de destino y tan solo puse un pie en el exterior del aeropuerto cuando se desconectó la conexión. La aplicación estaba buscando a un conductor y lo había encontrado. Decidí entonces conectar mis datos móviles, ya que no pensé que tampoco fuera a costar una millonada y ya no me era posible volver a conectarme al wifi. Y en ese instante volví a entrar en UBER y tuve que comenzar de nuevo la búsqueda porque se había cancelado. No dio lugar a que encontrara un coche cuando me llega un aviso de mi compañía telefónica YOIGO que me avisaba de que había consumido 6MB en 1 minuto y había alcanzado el primer límite de 50€ de consumo en datos móviles en el extranjero… Pensé, qué ha pasado? Si no me ha dado tiempo a gastar ese importe. Pero lo más divertido era que la compañía me solicitaba en ese momento aceptar seguir navengando hasta alcanzar el siguiente límite, a lo que por supuesto, no accedí. Entonces, creí que lo más acertado sería no volver a conectar mis datos móviles en USA.

Acto seguido, llamé a Marta por teléfono y para mi sorpresa no tenía el roaming activado porque hacía solo 2 meses que había cambiado de operadora y no me dejaba realizar llamadas en el extranjero. De inmediato, fui a buscar un taxi, a una cola que sin exagerar duró apróximadamente una hora, para pagar un taxi de 80$ por un trayecto que en UBER eran 30$. En fín… llegué a 123 California Avenue, donde Martita me estaba esperando para contarme todos los planes y aventuras que nos esperaban en LA.

Al día siguiente, fuimos a navegar en un barco en el conocido puerto de San Pedro. Allí, además de pasar un día maravilloso y conocer a Tarek y a su perro Enzo, y a Pauline y a su perro Skyline, pudimos ver a los delfines nadando en el mar e incluso a un león marino que se acercó a nuestra embarcación hacia el atardecer.

Me despido con el outfit que elegí para mi día en el puerto marítimo de San Pedro y espero que os guste.

¡ArnyBesos!

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SPRINGFIELD, BERHSKA, HAPPY SOCKS, FRED PERRY, DANIEL WELLINGTON & SHEEP SHADES

CARLOS ARNELAS